Me llamo Anabel, tengo treinta y pocos años….¡uy! acabo de sufrir un ataque de coquetería bastante tonto. Soy, soy, soy… bastante normalita, o al menos así me veo yo, aunque ahora mismo mi físico postembarazo me plantea ciertas molestias. Tengo virtudes que me adornan, defectos que me afean, y tantas miserias como cualquiera que lea estas letras. Vivo en una capital de provincias, del suroeste de España, junto con unas 140.000 almas más, y algún que otro desalmado. Estamos muy cerca de Portugal, a unos 6 kilómetros de la frontera, más o menos. En realidad, cada vez a menos kilómetros, porque la ciudad se acerca cada vez más a la frontera.

Ahora mismo, estoy tan ansiosa por presentarme, que no sé que poner. Los pensamientos me pisan las palabra,¡Jesús, que nervios!. Me gusta leer, escribir, ir al cine, salir de cañas con los amiguetes, ver algunas series de televisión y últimamente disfruto como una loca con lo que más me gusta de este mundo; mis bebés. Hace cuatro meses y medio (casi cinco), di a luz (parí) a mis gemelas: Julia y Patricia. Desde entonces tengo la baba cayendo en cascada permanente, y me encuentro en un estado de permanente enamoramiento; las miro y me digo ¡que bonitas son!, ¡que caritas mas lindas!..., y entonces les chillo un poquito :”¡chiqui que bonita eres!, ajo, ajo”, en ese momento miro a la otra y vuelvo a chillar “¡y tu también, que cara más preciosa!, titití, titití, titití”. Estos grititos, tienen siempre un sonete cantarín que, al menos a mis bebés les encanta, me sonríen, abren la boquina y los ojitos se les ponen pequeños, hechos una rajita. Así podría pasarme las horas, y de hecho, así es como las paso en muchas ocasiones.

Cuando la gente dice, eso de “¡ser padre te cambia la vida!”, tienen toda la razón del mundo; te cambia la vida, el cuerpo, las ilusiones, el humor, las prioridades, …, y provoca mucho, mucho, mucho agotamiento físico, y una sensación de miedo desconocido y completamente irracional.

Mi intención a la hora de publicar este blog, cuaderno, bitácora o como se llame, es por un lado, dar rienda suelta al escritor que casi todos llevamos dentro. Una vez que el escritor, ande suelto sin censores, mi vida volverá a sufrir un cambio radical, porque para ser sinceros, el censor que yo llevo dentro, me mira como una gárgola malhumorada desde una esquina de la habitación, me susurra y me dice, "¡chica, que forma de hacer el ridículo!", y me tiene acobardada.

Trataré de exponer las cosas que me gustan, las que no; como ha cambiado mi vida desde que nacieron las gemelas; problemas con el embarazo; vamos exponer mi vida y mis pajillas mentales, por si a alguien le interesara.

Este es mi primer cuaderno, mi primera entrada, espero que no horrorice demasiado.

Continuará….

1 comentario:

SBM dijo...

ANIMO GUAPA ME ENCANTA TU BLOG, Y ESTOY DESEANDO QUE METAS MÁS ENTRADAS. ESAS NIÑAS QUE TIENES TIENEN QUE SER GUAPÍSIMAS